Construidas pensando en un uso en lugares donde hay un alto grado de humedad o necesiten cumplir cualquier tipo de normas de higiene o sanitaria. Las carretillas de la gama Inox ofrecen una alta resistencia y son ideales para entornos específicos tales como el farmaceútico o de procesamiento de alimentos como carnes, pescados y mariscos, frutas y verduras o productos lácteos.